El llamado e-learning genérico o de catálogo tiene hoy en día una mala reputación. Ha surgido un nuevo “Valhalla”, un conjunto de potentes tecnologías interactivas que facilitan el aprendizaje colaborativo y el intercambio de nuevas ideas. Despreciado por las malas lenguas que lo desechan por sus páginas “pasa-pantallas” de enfoque lineal, el e-learning genérico languidece, arrinconado, y solo alguna vez se nombra en conferencias, como si de la oveja negra de la familia se tratase.
Dicho esto, nadie parece haber encontrado tiempo para contárselo a quienes adquieren e-learning. Según un estudio reciente, se estima que el mercado internacional del e-learning genérico crecerá 15 % CAGR (tasa de crecimiento anual compuesta) durante los próximos cinco años.
Existen buenas razones por las que se debe tener confianza en esta estimación, he aquí siete de ellas:
1.- Sigue siendo económico
El planteamiento “créalo una vez, utilízalo muchas veces” todavía goza de una gran ventaja en lo que a costes se refiere. Y el coste siempre será un factor importante para las empresas competitivas. Si lo pensamos de otra manera, por el precio de unos paquetes hechos a medida, las empresas pueden tener una biblioteca completa de conocimiento a su alcance, preparada para servir de apoyo a los empleados en un simple clic.
2.- Es coherente
Invertir en una biblioteca de e-learning ofrece una gran coherencia en el enfoque, tanto de la presentación como de la navegación por la información. Esto implica que los alumnos no tienen que volver a aprender el funcionamiento de un curso y adaptarse a la idiosincrasia de una editorial concreta. Significa que pueden centrarse en el aprendizaje que necesitan y pasar después a sus tareas con más facilidad.
3.- Están publicados
La creación de contenidos educativos es una profesión. La reputación del editor se pone al descubierto en cuanto escribe su nombre ya que debe mantener unos estándares y entregar un producto acorde con su prestigio. Puede parecer muy fácil para el creador sin escrúpulos de contenidos a medida diseminar interfaces llamativas pero con muy poca sustancia que las respalden. Vestir un abrigo de piel sin ropa interior, como decía mi abuela.
4.- Es rápido
Es tan rápido que puedes tenerlo mañana, no a dos meses vista si todo va bien. Y a todos nos gustan las versiones alfa. Y aprobarlos a regañadientes, aunque realmente no creas que cumpla su función pero tu equipo reclame la información cuanto antes.
5.- Está empaquetado y es fiable
No hace mucho tiempo el e-learning genérico trabajaba con estándares y certificados de una forma muy relajada, prestándoles atención e ignorándolos a partes iguales. Los vaivenes de SCORM se han solucionado en gran medida gracias a la llegada de soluciones en la nube, y el e-learning genérico ofrece una solución testada y probada. Hoy en día se puede hacer mucho más, pero pregúntate a ti mismo, ¿de verdad quieres volver a pasar por todos esos desafíos técnicos otra vez?
6.- Resultados cuantificables
Como el e-learning genérico ofrece la misma experiencia formativa a muchas más personas en distintas empresas, también te permite conseguir resultados más impactantes y mejor cuantificados. Si se gestiona de forma adecuada, puede mostrar con gran acierto lagunas de conocimiento en tu organización, aportando resultados de referencia realmente útiles. Y el aumento de aplicaciones en la nube no ha hecho más que mejorar esta situación.
7.- Ha evolucionado
Como era de esperar, los paquetes de e-learning genérico de hoy en día están enormemente distanciados de aquellos primeros programas “haz clic y repite” que se veíamos a finales de los años 90. Son más fáciles de manejar y ofrecen resultados muy mejorados. Los mejores programas, como Netex learningCoffee, son personalizables para ofrecer una experiencia individual, al tiempo que están exentos de los costes habituales y otros retos asociados con los paquetes hechos íntegramente a medida.
Como bien pudo haber dicho Mark Twain, cuando se trata de e-learning genérico, la noticia de su muerte es una exageración.
